Son muchas las personitas a las cuales tengo que dar las gracias, que haré esto de manera que no pueda olvidarme de alguna.

A ti, que sabes de la existencia de esta historia y que me llenas de elogios con cada párrafo que lees. Puedes estar seguro de que sin tu manera de ser, no habría tenido las bases para inspirarme en la creación de Riley. Eso te hace parte de ella.

A MOB, por brindarme un espacio en el que soy capaz de expresarme. A mis lectores: porque sin ellos, FURIA sería una historia más por descubrir.

Siempre he dicho que la música es mi musa principal. Quizás nunca leerán esto, sin embargo dicen por ahí que «Lo del César al César y lo de Dios a Dios». Cuando la General Motors Company figurara en mis ideas, automáticamente llegó Detroit como locación para la trama y curiosamente, «Eminem» los seguía de cerca. Sin duda, sin su ingenio y letras crudas que a algunos deja con la boca abierta y a otros nos pone a pensar, en estos momentos no iría ni a la mitad de la obra.

Por eso Gracias infinitas.

A Jessie J por haber aparecido en mí reproductor y que «Wild» fuera la primera en la lista una mañana de café caliente y galletas de avena, en la que una pareja de enamorados sobre una Honda plateada me hicieron correr por pluma y papel, escribiendo todo lo que la melodía me dictaba.

James Arthur, Maklemore, The weeknd, mis compatriotas del grupo Camila, Camila Cabello, MGK, Selena Gómez, fueron la sal y la pimienta que le dio sabor a esto.

Por último, gracias a Riley y a Miranda por enseñarnos a todos que:

«En un mundo lleno de prejuicios, el amor es el mejor de los refugios».