365 Días Contigo

¿Porqué ha de existir el mal de amor? Porque las almas que anhelan estar juntas se encuentran separadas por muchos kilómetros, el destino debería ayudar a que estén cerca y puedan vivir un amor lleno de sonrisas.

Me enamoré tanto de él que por más que trate de evitar que mi pecho sintiera un vacío sin su presencia fue inevitable, sigo sintiendo aquel hueco en mi pecho por no tenerlo cerca. Algunas veces siento que la luna nos ayuda a sentirnos cerca, porque podemos verla e imaginar que estamos juntos tomados de la mano sintiendo un poco de felicidad entre la miseria de nuestras vidas.

¿Cómo olvidarlo? No tengo idea el como hacerlo, ya ha pasado un año desde que mis sentimientos salieron a la luz, pero desde entonces han sido 365 días aguantando el calor que aquel amor aguarda dentro de mí esperando a ser correspondido.

Tal vez seguiremos siendo el uno para el otro, pero tal vez en esta vida no se nos dió el cumplir el sueño de amar con total intensidad. No miento al decir que confío en ti incluso con una venda oscura en mis ojos porque sé que me llevarás por una pequeña pizca de felicidad; quisiera que fueras mi guía en la travesía de encontrar la oportunidad de ser tuya, o que me guíes por el camino donde todo lo bueno de ti se esfume de mi memoria.

Posiblemente en estos 365 días que transcurrieron tus sentimientos han cambiado pero el simple hecho de la lejanía de nuestros cuerpos no puedo lograr sentir aquel sentimiento. Un año, 12 meses llenos de amor hacia ti, vivo con la ilusión de algún día verte y si es mi oportunidad probar tus finos labios, el rosado de ellos me enamoran tanto que imaginar los cerca de ti es como cuando veo el hermoso café de tus ojos.

Quisiera poder tener la oportunidad de verte y estar durante un día a tu lado dentro de los próximos 365 días del año, con la ilusión que permanezcas a mi lado.

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